El Ministerio de Sanidad del Gobierno de España ha publicado esta semana una documento en el que se recoge una serie de recomendaciones diseñadas para establecer estándares mínimos en las operaciones y mantenimiento para la reapertura de las piscinas definidas éstas en el Real Decreto 742/2013, de 27 de septiembre, por el que se establecen los criterios técnico-sanitarios de las piscinas.

El objetivo de este informe es el de minimizar el potencial de transmisión de COVID-19 y proporcionar un ambiente seguro y saludable en estas instalaciones. A la hora de su elaboración se han tenido en cuenta las recomendaciones de las autoridades competentes de las Comunidades y Ciudades Autónomas, así como las recomendaciones del sector de la piscina recabadas en la propuesta de protocolo que ASOFAP, como patronal del mismo, presentó al Ministerio de Sanidad.

Las conclusiones a las que llega el informe del ente ministerial son las siguientes:

1. Los riesgos asociados al COVID 19 están relacionados con la interacción entre personas que acuden a las piscinas. Es importante la concienciación colectiva de distanciamiento social y el respeto a las distancias mínimas entre las personas.
2. La limpieza y desinfección diaria de superficies y zonas comunes es fundamental para evitar la propagación del virus.
3. Es fundamental, mantener correctamente el tratamiento y niveles de desinfectante residual en el agua de los vasos y duchas.
4. Es una grave responsabilidad moral prevenir el contagio de la enfermedad poniendo los medios oportunos para evitar contagiar y ser contagiados. Por ello, todo usuario y/o trabajador de estas instalaciones deberá observar las medidas de distancia social y el resto de medidas recomendadas.

A este documento que recoge las RECOMENDACIONES DEL MINISTERIO DE SANIDAD le complementa el INFORME SOBRE TRANSMISIÓN DEL SARS-CoV2 en playas y piscinas realizado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).